En todo caso, me las he apañado para utilizarlo al tiempo que mantengo desenfocados algunos elementos relevantes de la imagen. Por algún cortocircuito cerebral, al leer la palabra de la semana pensé inmediatamente en esta imagen. Probablemente tenga que ver con las fotografías publicitarias, que son realmente fuertes. ¿Quién no ha visto un anuncio de Pandora, con una figura enfocada y el resto desenfocadas...? El caso es que, dicho y hecho, me puse manos a la obra.
Podría decir que la imagen final no salió a la primera, pero no sería del todo exacto. Primero probé esta composición, que no me terminaba de gustar vista en la cámara. Después hice otras composiciones, probé otros fondos, e incluso cambie de pulsera por una de bolitas de jade con unas estrellas de piedra. Tras tratar de procesarlas todas en PS, la que más me gustaba era la primera, pero en las tomas que había hecho no había sacado ninguna con el pelo del niño ni la mano izquierda de la niña enfocadas. Vuelta al estudio y nuevas tomas, esta vez las suficientes para asegurar que todo estaba enfocado correctamente.
Las 14 fotograbáis empleadas quizá sean demasiadas, pero la apertura que he utilizado ha sido f/2.8, y a esa distancia, la profundidad de campo es ridícula. Como las piedras de la izquierda están casi en el mismo plano que el niño, después de hacer el apilamiento he tomado la foto en la que enfocaba una parte de la niña para recuperar el desenfoque de esa parte. La cámara es la de siempre: Fuji X-pro2 con el 80mm Macro f/2.8, en este caso a ISO 200, f/2,8 y velocidad 1/125.