Estos días han sido propicios para mejorar la técnica en la nieve. Todo fotógrafo "digital" sabe que la nieve es muy puñetera, porque se dedica a engañar a los fotómetros provocando fotos demasiado oscuras (con un histograma que no cubre todo el rango posible). Pero ademas de ese problema tenemos otros, como el efecto del frío sobre las baterías (que las agota hasta dejarlas listas para una buena recarga) o sobre nuestras propias manos: ¿ habéis probado a manejar la cámara con unos guantes un poco gordos?. Al final tienes que quitarte los guantes, lo que provoca que, si está nevando, o si hace un poco de viento, los dedos vayan perdiendo sensibilidad, con lo que tampoco podemos manejar la cámara...
En relación con esto, he leído estos días una entrada en un blog, que es realmente interesante: Javier Camacho nos cuenta sus experiencias aunando sus dos pasiones: el alpinismo y la fotografía. Si habéis tenido las manos frías estos días, imaginaos a 40º bajo cero, con una sensación térmica de -85º... Efectivamente: sin guantes, los dedos se congelan... Realmente merece la pena leer la entrada y ver las fotos que hace.
Sin llegar a tanto (sólo estábamos a -10º, y no había mucho viento), os dejo una "postalita" del parque de La Chopera, en Guadalajara.